Jornada estupenda dónde aparte de ver a un montón de amigos nos fué realmente bién en el ring, esta vez sólo fuimos con nuestra cachorrita Chereka a competir, pero nos fuimos con unos amigos que llevan Boxers, esos perros de morro chato que parece que le hayan dado un portazo en la cara y se les haya metido el morro para dentro (cuando lo lean me matan).